El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a plantear la posibilidad de buscar un tercer mandato, desafiando la norma constitucional que establece un límite de dos períodos en la Casa Blanca. En una entrevista con NBC, Trump afirmó: “No bromeo” al ser cuestionado sobre sus intenciones. Agregó: “Hay métodos con los cuales podría hacerse”, sugiriendo que hay alternativas para lograr este objetivo.
Trump, de 78 años, ha expresado en múltiples ocasiones su deseo de extender su tiempo en el poder, pero sus declaraciones recientes son las más definidas en cuanto a un plan para conseguirlo. En su segunda presidencia, ha implementado una serie de decretos y ha utilizado su influencia, incluso a través de figuras como Elon Musk, para modificar aspectos del gobierno federal. Según Trump, su base de seguidores está ansiosa por que tome esta decisión.
Mencionó a NBC: “Mucha gente quiere que haga esto”. Sin embargo, también indicó que considera que es “demasiado temprano para pensar en eso”, sugiriendo que aún hay un largo camino por recorrer en su administración actual.
Desafíos a la Constitución
Modificar la Constitución estadounidense para permitir un tercer mandato presidencial implica superar obstáculos significativos. Se requeriría una mayoría de dos tercios en la Cámara de Representantes y en el Senado, una meta difícil de alcanzar para el partido Republicano, que actualmente no cuenta con los números necesarios.
Trump admitió que se le han presentado planes que le permitirían buscar la reelección, pero no ofreció detalles específicos. Cuando NBC le preguntó sobre un posible escenario donde el vicepresidente JD Vance se postulara como candidato y luego renunciara para ceder el poder a Trump, respondió que “ese es un método”. A pesar de esto, no reveló otros métodos alternativos.
Si Trump optara por no enmendar la Constitución a través del Congreso, necesitaría el apoyo de dos tercios de los 50 estados para convocar una convención constitucional que propusiera modificaciones a la Carta Magna. Esta opción es igualmente difícil, ya que requeriría la ratificación de tres cuartos de los estados, lo que parece una tarea complicada en el contexto político actual.
Históricamente, Estados Unidos nunca ha convocado a una convención constitucional. Todas las 27 enmiendas a la Constitución han sido aprobadas a través del Congreso, lo que hace que la idea de un tercer mandato presidencial sea aún más compleja de llevar a cabo.