El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este domingo que impondrá aranceles del 100% a todas las películas producidas fuera del país. En un mensaje publicado en su red social Truth Social, el Mandatario expresó que “la industria cinematográfica estadounidense está muriendo rápidamente”. Según Trump, otros países ofrecen incentivos que fomentan el alejamiento de cineastas y productoras estadounidenses, lo que está generando una crisis en Hollywood. “Hollywood y otras zonas del país están siendo devastadas”, aseguró.
La declaración de Trump también incluyó un fuerte discurso sobre la seguridad nacional. “Este es un esfuerzo conjunto de otras naciones y, por lo tanto, una amenaza para la seguridad nacional. ¡Es, además de todo lo demás, mensaje y propaganda!”, indicó. En este contexto, el presidente anunció que “autorizo al Departamento de Comercio y al Representante Comercial de Estados Unidos a iniciar de inmediato el proceso de instaurar un arancel del 100% sobre todas las películas que ingresen a nuestro país producidas en el extranjero”.
Impacto en la industria del cine
La industria cinematográfica estadounidense, que ha sido un pilar de la cultura popular global, se enfrenta a desafíos significativos. Trump subrayó que la llegada de películas extranjeras ha perjudicado a los cineastas locales, argumentando que esto no solo afecta a los artistas, sino también a la economía del país. “Queremos cine hecho en Estados Unidos, otra vez”, concluyó el presidente, enfatizando su deseo de revitalizar la producción nacional.
Este anuncio ha generado diversas reacciones en la comunidad cinematográfica y entre los hinchas del cine. Algunos ven esto como una medida proteccionista que podría limitar la diversidad cultural y artística en los cines, mientras que otros apoyan la idea de proteger la industria local de la competencia extranjera.
El impacto de estos aranceles podría ser significativo, ya que muchas películas exitosas en Estados Unidos provienen de colaboraciones internacionales. De acuerdo con datos de la Motion Picture Association, en 2022, más del 25% de los ingresos de taquilla en Estados Unidos fueron generados por películas extranjeras. Este nuevo enfoque podría cambiar drásticamente esa dinámica.
Además, la decisión de Trump también podría tener repercusiones en las relaciones internacionales. Países que ven al cine como una exportación cultural podrían responder con medidas similares, creando un conflicto que afectaría a la industria global. La posibilidad de que otros gobiernos impongan aranceles a las producciones estadounidenses es un escenario que ya se discute en círculos diplomáticos.
Por otro lado, los analistas del sector señalan que esta medida podría impulsar la producción local. Si bien la intención de Trump es proteger la industria estadounidense, la implementación de estos aranceles podría desincentivar la inversión extranjera en el cine estadounidense, ya que los productores podrían optar por filmar en otros países donde las condiciones sean más favorables.