Tras una inesperada derrota en la segunda ronda del Masters de Montecarlo, donde cayó por un contundente 6-3 y 6-4 ante Alejandro Tabilo (32°), Novak Djokovic (5°) se presentó en conferencia de prensa con un tono irónico y autocrítico. A pesar de ser considerado uno de los mejores tenistas de la historia, el serbio no ocultó su descontento con la actuación que mostró en la cancha.
Los periodistas le recordaron que no había sido “su mejor día en la oficina”, a lo que Djokovic, en un gesto de autocrítica, rió y comentó: “Lo de hoy ha sido algo así como mi peor día. Esperaba que no fuese a ocurrir, pero había una posibilidad muy alta de que jugase de esta forma. No lo sé. Sencillamente horrible. Jugar así te genera una sensación horrible, lo siento por toda la gente que tuvo que ver esto.”
Sin explicaciones claras
Al ser interrogado sobre las razones de su bajo rendimiento, Djokovic fue evasivo y respondió: “No lo sé. No la tengo. La tengo y no la tengo. La verdad es que me da igual.” Este tipo de autocrítica viene en un momento clave, ya que el tenista busca retomar su nivel de juego justo antes de una de las competiciones más importantes del circuito: Roland Garros.
La conferencia se tornó más intensa cuando un reportero le preguntó sobre sus problemas físicos, tras haberlo visto en la cancha de práctica con molestias en el brazo. Djokovic, con una actitud un tanto fastidiosa pero con una sonrisa irónica, afirmó: “Está todo bien. Está todo bien. Es solo una cosa menor.” A pesar de sus palabras, la duda sobre su condición física persiste entre los aficionados y expertos del deporte.
En cuanto a sus objetivos en la gira de arcilla, el serbio no dudó en señalar su meta principal. Al ser preguntado sobre sus aspiraciones, respondió de manera contundente: “Roland Garros.” Ante la insistencia del periodista que le preguntó si eso era todo, Djokovic reafirmó: “Eso es todo.”
La derrota ante Tabilo marcó un hito significativo en la carrera de Djokovic, quien ha sido un competidor constante en los torneos de tenis. A pesar de las expectativas que tenía, el serbio confesó: “Esperaba, al menos, poder firmar una actuación decente. No algo como esto. Ha sido horrible. No tenía expectativas muy altas, la verdad: sabía que iba a tener un rival muy duro y sabía que probablemente iba a jugar muy mal… pero tan mal, la verdad, no me lo esperaba.”