Nicolás Jarry, actualmente en el puesto 58 del ránking mundial, sufrió su cuarta derrota consecutiva en primera ronda al caer este martes 8 de abril ante el búlgaro Grigor Dimitrov, ubicado en el puesto 18, durante el Masters 1000 de Montecarlo. Este resultado deja al tenista chileno en una situación complicada dentro de la temporada 2025, donde ha obtenido solo dos victorias y ha acumulado seis derrotas.

El encuentro comenzó con un leve optimismo para Jarry, quien logró quebrar el servicio de Dimitrov en el primer juego. Sin embargo, la alegría fue efímera, ya que el búlgaro, quien llegó a Montecarlo tras alcanzar las semifinales en Miami, devolvió rápidamente el quiebre. A pesar de un inicio parejo, las cosas se desequilibraron en el sexto game, donde Dimitrov volvió a romper el servicio, lo que le permitió llevarse la primera manga por 6-3.

Ya en el segundo set, Dimitrov mostró su dominio desde el inicio, quebrando el saque de Jarry en el primer y tercer juego. Aunque el chileno logró recuperar un quiebre en el cuarto juego, no pudo mantener la presión sobre su rival. En el décimo juego, Jarry luchó arduamente, levantando cinco puntos de partido y generando dos oportunidades de quiebre que podrían haber extendido la contienda. Sin embargo, en su séptima oportunidad, el búlgaro selló la victoria, dejando a Jarry con una nueva derrota, lo que plantea serias preocupaciones sobre su desempeño y su futuro en el circuito.

Un inicio de temporada complicado

La situación de Nicolás Jarry en 2025 ha sido difícil desde el principio. Con solo dos victorias en el año, su rendimiento ha sido inferior al esperado. Las derrotas en primera ronda se han vuelto una constante, lo que preocupa tanto a Jarry como a sus seguidores. La caída en el ránking es inminente si no logra revertir esta tendencia negativa en sus próximos torneos.

El tenista chileno ha enfrentado a rivales de gran nivel, lo que ha complicado su camino en los torneos. Además, la presión de competir en eventos de alto calibre como el Masters 1000 de Montecarlo puede afectar a cualquier jugador, especialmente a uno que busca recuperar confianza tras una serie de resultados adversos. La situación actual de Jarry no solo se refleja en el ránking, sino también en su estado mental, ya que la acumulación de derrotas puede llevar a una crisis de confianza.